El porcentaje de empresas que cuentan con una página web en España es mucho más bajo que en otros países europeos.
Desde hace unos cuantos años la importancia de tener presencia en Internet se había tornado un recurso valioso para las pequeñas y medianas empresas. Esto se ha incrementado exponencialmente desde marzo de 2020. Sin duda, el inicio de la pandemia forzó a muchos negocios a utilizar herramientas digitales y de diseño web para poder mantenerse al día.
Actualmente, se calcula que el 78 % de las pequeñas y medianas empresas y autónomos no cuentan con una página web propia para el desarrollo de su actividad.
El porcentaje de empresas que cuentan con una página web en España es mucho más bajo que en otros países europeos. Esto hace a las empresas locales menos competitivas en mercados exteriores, ya que tienen menos visibilidad y oportunidades.
Un informe realizado con 400 responsables de pequeñas y medianas empresas de toda España sacó a la luz datos muy reveladores. Los pequeños empresarios y autónomos son conscientes de que la presencia digital podría ayudar a sus negocios a sobrevivir y expandirse. La mayoría de ellos reconocen que se podrían beneficiar de un proceso de digitalización para aumentar su facturación y comunicación con los clientes.
De hecho, el 29 % de los encuestados afirman que les habría gustado contar con una página web con canal propio de venta antes de la pandemia. En aquel momento, sólo un 7 % de ellos lo tenía desarrollado e implementado, una cifra muy baja si se pone en el contexto europeo.
No obstante, existe la consciencia entre los empresarios de que la digitalización es un proceso importante para aumentar la competitividad y la rentabilidad de la PYME. Pero el análisis de los datos revela que el desconocimiento es la principal barrera de entrada.
Un 72 % de los autónomos consideran que se tarda más de un día en crear una página web y un 67 % estima que los costes pueden llegar a elevarse hasta 100 euros. La realidad es que es un proceso que puede llegar a estar hecho en una hora y que muchas plataformas que sirven para ello son completamente gratuitas. Sin embargo, la calidad del trabajo y las funcionalidades que cada web requiere son diferentes. De este modo, resulta esencial que las empresas que no cuentan con personal propio, contraten diseño web profesional. Hoy en día es posible conseguir realizar estas tareas utilizando a especialistas que trabajan como autónomos. Esta forma de trabajar disminuye considerablemente los costes, ya que este personal no consta como un gasto constante, sino puntual cuando se requieren sus servicios.
Además, los tecnicismos que en el mundo digital se usan continúan siendo desconocidos para una parte importante de autónomos y pymes. El 35 % de los empresarios de pequeños negocios afirma no saber qué es el término SEO. Y SEM y SEO son elementos esenciales sin los que es muy difícil competir en la arena digital, sin importar el sector.
La percepción generalizada de las empresas es que entrar en el mundo digital sería beneficioso para sus negocios. No obstante, crear una página web, diseñar una estrategia de marketing online o implantar un canal de venta digital es algo que requiere grandes conocimientos. Afortunadamente, estas tareas se pueden delegar, como se ha mencionado anteriormente.
Es, por tanto, necesario cambiar la mentalidad y acercar los negocios a la digitalización para que estos se puedan beneficiar de todas las ventajas. En este sentido, la ayuda flexible de un profesional autónomo puede ser una de las claves.
Si ya antes de la pandemia estar presente en el mundo digital implicaba tener una ventaja respecto a otros negocios, ahora se torna un movimiento clave para subsistir.
Muchos compradores han cambiado radicalmente sus hábitos de consumo estos últimos dos años, y esta transformación continuará con casi total seguridad; un estudio sobre eCommerce realizado por UPS afirma que más de la mitad de los consumidores tienen pensado seguir optando por el comercio online.
La presencia en el mundo digital ayuda a la empresa a darse a conocer, captar nuevos clientes, comunicarse con ellos de una forma efectiva, estar presentes las 24 horas del día… En algunos casos se trata de tareas que ya realizaban presencialmente, pero que son necesarias también en la esfera digital.
Existen varias claves que ellos consideran imprescindibles para todos aquellos negocios que quieran abordar su digitalización.
La página web siempre debe crecer de forma paralela al negocio. Por eso, al principio, aunque debe estar presente, es mejor cubrir las necesidades con una web que requiera pocos recursos (tanto de tiempo como económicos). A medida que el negocio vaya creciendo, la página web también deberá hacerlo.
Hay negocios que se beneficiarán simplemente de tener una página web en la que se describan los servicios que ofrecen o cuenten qué tipo de productos fabricanOtros, como restaurantes o peluquerías, sacarán más provecho si se pueden realizar reservas desde esa misma web. Sin duda, cada tipo de negocio tiene unas necesidades diferentes.
Crear una página web con pocos recursos no debe ser sinónimo de mala calidad. Será importante apostar por un contenido de calidad (buenas fotografías, textos esclarecedores…). La web, además, debe ser un sitio donde el mensaje llegue de una forma efectiva. La información se debe presentar de forma clara, sencilla e intuitiva para ayudar a los clientes.
Tener una página web es imprescindible a la hora de darse a conocer, pero, además, la empresa puede aprovechar los datos que recopile para aprender de sus clientes. La revolución del big data está permitiendo ya a empresas de todo tipo captar tipos de consumidores muy concretos.
Sin duda, el diseño web es una herramienta imprescindible hoy en día para que las empresas crezcan. En España, la presencia digital aumenta, pero los datos muestran que aún queda mucho por hacer. Contar con especialistas freelancers puede ser un paso determinante en esta materia.