La Audiencia Provincial de Salamanca ha condenado a N. como autor de un delito continuado de apropiación indebida agravado por la cuantía, concurriendo la circunstancias atenuante ordunaria de dilaciones indebidas, a la pena de tres años, seis meses y un día de prisión, junto a una multa de diez meses con una cuota diaria de seis euros, con un día de privación de libertad por cada dos cuotas impagadas, con inhabilitación en consecuencia del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo que dure la condena.
En total y en concepto de responsabilidad civil, deberá indemnizar a la demandante a la cantidad de 236.654,72 euros más intereses legales, a sí como a D. a la cantidad de 30.000 euros por daños morales. Además, se condena a N. al pago de las costas del juicio incluidas las de la acusación particular.
Según recoge la sentencia, la explotación del comercio había sido heredada y era compartida semanalmente por el condenado y la agraviada. Un sistema que tuvo que ser ampliado a periodicidad anual por una primera sentencia del Jugado de Primera Instancia de Ciudad Rodrigo que tuvo que mediar en la conformación de la mercantil. Tras un primer año de gestión por parte de la agraviada, el condenado tomó las riendas del negocio en mayo de 2015.
A partir de ese momento, el acusado fue detrayendo parte del dinero recaudado en el establecimiento con la venta de lotería y otros juegos de modo que llegada la liquidación remitida por Loterías y Apuestas del Estado no había saldo suficiente y se generó un impago superior a los 132.000 euros.
La pericial judicial practicada unida a las actuaciones y, ratificada en la vista celebrada en la Audiencia Provincial, puso de relieve “de forma inequívoca” que en los meses que el condenado estuvo al frente del negocio alteró los datos de tesorería apropiándose de dinero en caja de un total de 236.654,72 euros, sumados los intereses y como resultado asimismo de la venta del establecimiento para hacer frente a las deudas generadas.