El CD Guijuelo cae derrotado de manera injusta contra el Talavera (1-0) después de jugar desde el minuto 26 con un jugador menos por expulsión de Gavilán.
El CD Guijuelo se ha quedado (casi) sin opciones de clasificarse para la Copa del Rey después de caer ante el CF Talavera con una actuación arbitral más que cuestionable y que dejó a los de Jordi Fabregat con diez jugadores en el minuto 26 por una expulsión de Manu Gavilán. El delantero del Guijuelo saltó con el codo en un balón aéreo en una jugada que ocurre cada día en los campos de fútbol y que se castiga o con falta, o con tarjeta amarilla. Pero el andaluz Raúl Chavet decidió romper el partido y dejar al equipo 'verde' sin opciones. Antes, Manzano sí se tuvo que retirar lesionado tras recibir un codazo de un contrario...
Y mucho menos después de tener la mala fortuna de haber encajado el 1-0 en el minuto 42, justo antes del descanso, quedándose sin opciones en el partido y, lo que es peor, en una hipotética Copa del Rey para la próxima temporada. En la segunda mitad, los 'verdes' lo intentaron, pero su entrega no valió para poder sacar algo positivo, lastrados también por su falta de gol, ya que no fueron inferiores a su rival.
Jordi Fabregat saltó al terreno de juego con un once que contó con alguna novedad como fue la presencia de Abel en el eje de la zaga junto a Ayala y Kevin, con Manzano y Raúl en las bandas y la vuelta de Luque al centro del campo. Arriba, Manu Dimas acompañó a Manu Gavilán para poner en apuros a los talaveranos.
El choque comenzó con un CD Guijuelo que quería tener el balón desde el inicio apoyándose en Luque y Ayub, principalmente, con el fin de buscar buenas aperturas por bandas y buenas opciones para Dimas y Gavilán, los estiletes del equipo de Fabregat.
No en vano, el primer susto llegó de la mano del Talavera tras una falta lateral que Mario remató al lateral de la red, pero con un Guijuelo que se mostraba sobrio y seguro en el terreno de juego y que debía madurar sus acciones de ataque. Minutos antes, Ayub y Gavilán habían generado una buena opción de gol que se perdió antes de llegar a buen puerto.
Los de Fabregat buscaban la velocidad de sus puntas, que cayeron en fuera de juego en varias ocasiones seguidas, pero ésa podía ser una de las soluciones del equipo si ajustaba bien el movimiento y el envío, para poder poner en problemas a los talaveranos.
Pero, en el minuto 27, el colegiado decidió cortar por lo sano y rompió el partido. Manzano tuvo que retirarse lesionado por una acción con un rival en la que el árbitro no sancionó ni falta, mientras que en la siguiente acción mandó a la calle a Gavilán tras saltar con el brazo en un balón aéreo, cuyo mayor castigo debió ser una amarilla.
Ante esta situación, Fabregat dio entrada a Suárez por el lesionado Manzano, regresando el equipo a una defensa de cuatro hombres, con el fin de sacar el mejor resultado posible después de tener que afrontar más de 60 minutos con un jugador menos y, quien sabe, si decir adiós a las opciones de Copa.
Pero, había que jugar y luchar hasta el final... aunque en el 42, Jorge iba a hacer el 1-0 tras rematar una volea después de recibir un buen centro y apagar así las ilusiones de los de Fabregat, que no pudieron reponerse al golpe recibido por el colegiado y por el primer gol recibido antes del descanso.
Poco después de salir de los vestuarios, el canario Manu Dimas dilapidó las opciones de sacar algo positivo en el partido después de fallar un claro mano a mano contra Arenas después de recibir un buen pase de Ayub, dilapidando una nueva ocasión que impidió al equipo meter miedo a los talaveranos. Y es que, sin gol no hay paraíso...
En el 60, Fuster saltó al terreno de juego por Dimas para intentar cambiar las cosas, pero todo parecía destinado a la derrota del Guijuelo, con el árbitro como protagonista. Diez más tarde, Fabregat agotó los cambios dando entrada a Juanra por Borja en el centro del campo.
El paso de los minutos daba alas a un Guijuelo que estaba a tan solo una acción de poder sacar algo positivo, pero tuvo que conformarse con una derrota injusta que le deja con cara de tonto. Juanra la tuvo en el instante final del partido, pero su remate cruzado se marchó fuera dilapidando las opciones de sacar algo positivo del partido.
Con el pitido final, el CD Guijuelo vio finalizado su calvario en este partido que el colegiado condicionó, y mucho, que le ha dejado sin opciones de luchar por un objetivo ambicioso como es la Copa del Rey. Ahora, toca cerrar la permanencia y terminar de la mejor manera posible.