Aquimisa Carbajosa rmeó a contracorriente, consiguió empatar el partido, pero no fue suficiente para conseguir la victoria frente a Algeciras. El acierto desde el exterior de los visitantes hizo imposible el sueño de los charros.
Todo podía ocurrir en el pabellón de Carbajosa, desde la posibilidad de jugar los play off de ascenso, hasta la posibilidad de jugar los de descenso. Un auténtico crucigrama que se veía venir según las normas y organizacion establecida por la Federación Española en una época en la que el coronavirus ha condicionado el devenir de la competición. Así, Aquimisa Carbajosa con una racha positiva y en línea ascendente se enfrentaba a un Algeciras, también con opciones similares a sus contrincantes, ahora bien, sin el factor del público.
Comenzó el encuentro con una revolución de más. Nerviosismo y cierta precipitación en ataque dieron lugar a la primera gran diferencia en el marcador para los visitantes: 14-24, con un gran Miguel Ortega, que consiguió dar alas a su equipo con hasta 12 puntos, no solo desde la línea de 6,75, sino también ganando la partida a su defensor en acciones individuales. Un punto más en defensa y Aquimisa Carbajosa consiguiría correr, plano en el que mejor se siente, para dar la vuelta al marcador.
Dicho y hecho, Yeyo puso las pilas a los suyos y la reaparición de Arturo Cruz aportó eso que tanto buscaba el equipo; veteranía, triples y correr: 20-26 y un paso más cerca del objetivo. Esa intensidad defensiva comenzaba a dar resultados, ante el todavía presente acierto de Miguel, pero la desaparición de otros como Bola Olaniyan ante la gran defensa de los interiores; tanto de Doudou como Illikainen, precisamente un triple de este puso el final al segundo cuarto: 35-39.
Tercera batalla, tercer periodo y Aquimisa Carbajosa seguía remando a contracorriente. La defensa se mantenía, la intensidad también, pero el ataque comenzó de nuevo a fallar. Los de Yeyo Vicente, demasiado cerrados no eran capaces de contrarrestar el muro de Algeciras, que tenía su fortaleza dentro de la zona con Bola y Estévez. El encuentro, comenzaba a ensuciarse y de postre un mini partido, diez minutos: 49-49.
Idas y venidas, canasta y respuesta. Aquimisa Carbajosa comenzó encajando cinco puntos de inicio, pero respondió con un triple de Mulero y un mate a dos manos. Las canastas comenzaban a entrar, la defensa seguía funcionando y el rebote seguía siendo posesión de los naranjas. Y, por fin, se puso el conjunto local por delante en el marcador a través de una autentica jugada de equipo. Consiguió robar la pelota Bakary, consiguió salvarla y no solo eso, sino que dio el pase largo necesario a Arturo, para que este cediera la canasta a Guillermo Mulero. El banquillo recibió a su equipo ante el tiempo muerto y la afición se levantó como no lo había hecho en toda la temporada. Muy difícil sería para Algeciras jugar con un pabellón así y un marcador tan apretado (61-59).
La efectividad en triples, sin embargo mermó las opciones de los locales, que en un nuevo quiero y no puedo, tuvieron la posibilidad en un tiro desde la línea de 6,75 de Arturo Cruz de forzar la prórroga. No pudo ser y ahora toca esperar (67-70).