Los dos elementos desconocidos de la fiesta del Corpus Christi

El historiador de Arte y técnico de la Catedral, Raúl Benito, recuerda que la procesión de este domingo, que saldrá a partir de las 18:00 de la Catedral, “es la más importante a lo largo de todo el año, por encima de cofradías y de piedad popular, porque directamente sacamos a la calle el Cuerpo de Cristo”. El Santísimo Sacramento se porta en la custodia de asiento de la Catedral, que se conserva todo el año en una de las vitrinas de la sacristía. La parte más antigua de la misma corresponde al segundo tercio del siglo XV, y después fueron incluyendo más añadidos, informa el Servicio Diocesano de Comunicación Social.

Además de la custodia, en el cortejo de la procesión se pueden ver algunos elementos poco comunes en otros desfiles procesionales. Como por ejemplo, la basílica, “que señala que la Catedral de Salamanca es basílica menor, esto quiere decir que desde Roma, el Papa concede el privilegio a algunos templos de ser basílica”, aclara este experto. En concreto, confirma que existen basílicas mayores y menores, “y tienen el privilegio de tener este elemento procesional, que en otros lugares simplemente aparece como una estructura mucho más reducida, a modo de un paraguas (umbela basilical), pero en la Catedral de Salamanca se conserva esta otra estructura de mayor tamaño, y que se traslada en su interior sobre ruedas”.

Cabe recordar que la concesión de las basílicas depende de la Basílica de San Juan de Letrán, que es la Catedral de Roma, y donde el Papa toma posesión. Por eso, la basílica que procesiona en el Corpus “identifica a este tipo de templos, de color rojo y amarillo”, que son los colores del Senado Romano y que fueron adoptados por el gobierno papal. En este caso, la basílica de la Catedral de Salamanca está rematada por una pieza de plata, con un orbe rematado con la Cruz.

Otro elemento también propio de las basílicas, y que sale también en la procesión de Corpus Christi de este domingo es el tintinábulo, una insignia que la Santa Sede concede a las iglesias que son basílica, que consiste en un pequeño campanario. “La campana va sonando a lo largo de la procesión delante de la custodia, para anunciar su paso”, describe este técnico de la Catedral.

Los tintinábulos siempre aparecen rematados con la imagen de la titular del templo, en este caso, La Asunción de la Virgen, “y por eso aparece una representación de Nuestra Señora con los ángeles”, describe Benito. Por otra parte, insiste en que es una procesión “muy rica y solemne”, en la que se visten las calles, con alfombras y altares, o colgaduras en los balcones al paso de la procesión.

Desde la Catedral, Raúl Benito anima a la gente que reside en las calles del recorrido del cortejo, a que vistan sus balcones. Como es habitual, saldrá de la Catedral por la puerta del Obispo y continuará por la calle Calderón de la Barca, Libreros, plaza de San Isidro, Compañía, Prior, Rúa y regreso al templo por la Puerta de Ramos.