El Gobierno sigue dando largas sobre la recuperación de todos los servicios ferroviarios suprimidos en Salamanca a lo largo de la pospandemia y se limita a asegurar que "en los próximos meses" todo volverá a la normalidad.
A preguntas de los diputados populares sobre cuándo pretende el Ejecutivo "reponer la cuarta frecuencia del Alvia que unía Salamanca con Madrid suspendida por la pandemia", la respuesta oficial del Ejecutivo, recogida en el Boletín de las Cortes Generales, es que "RENFE ha mantenido una programación de servicios que ha ido por delante de la recuperación de la demanda en los distintos corredores" a lo largo de "toda la crisis sanitaria" y que la voluntad de la compañía "es completar el restablecimiento de los servicios que todavía no están operando respecto a la situación anterior a la pandemia en los próximos meses".
El Gobierno reivindica en su respuesta el "compromiso" con Salamanca porque el 18 de abril se recuperó el tercer Alvia "a pesar de que la demanda en el servicio Alvia entre Salamanca y Madrid en 2021 fue un 66% inferior a la registrada en 2019 (con anterioridad a la pandemia)", lo que supone "solo un tren menos por sentido respecto a la oferta existente con anterioridad a la COVID19". A mayores, añaden que la ocupación durante el mes de mayo de 2022 fue nueve puntos inferior a la del mismo mes de 2019, antes del coronavirus "a pesar de que existen menos servicios que en aquel momento". Esta respuesta entronca con la postura que siempre han esgrimido el Gobierno y RENFE: que no hay demanda suficiente como para recuperar de golpe todas las frecuencias.
La situación del trenhotel Lusitania es más complicada. El Gobierno respondió la semana pasada a las cuestiones planteadas por los diputados interesándose por la recuperación de los trenes nocturnos, entre los que consta el Lusitania.
Textualmente, el Ejecutivo contesta que "los servicios nocturnos de tren-hotel forman parte de los servicios comerciales. Este tipo de servicios no reciben ningún tipo de aportación pública, por lo que deben ser sostenibles por sí mismos, de forma que se asegure su viabilidad. En función de lo anterior y atendiendo a las características particulares de este producto, se informa que, en estos momentos, no existe previsión respecto a su reposición".
El capítulo de conexiones por tren se cierra con una actualización de las obras de electrificación de la línea Salamanca-Fuentes de Oñoro: se han invertido 110 millones de euros y los trabajos "avanzan a buen ritmo". La finalización "está condicionada por las actuaciones de reposición de servicios afectados", de los gálibos y de la modificación de parte del proyecto. El Gobierno no estiman fechas para acabar con los trabajos.
