En el 'radar' de numerosas prometidas de nuestro país, está ella: Fely Campo. Cada boda define a quien la celebra, al igual que lo hace el vestido que cada novia elige para su gran día. A pesar del paso de los años, esta veterana diseñadora en la creación de looks nupciales no ha cambiado su discurso, pues entiende que cada mujer debe "sentirse ella misma y alejarse de los disfraces".
Sus diseños son los más comentados en el panorama de la moda. Las mujeres que llegan hasta su atelier de novia, ubicado en la calle Laguna Negra en Salamanca, irradian pura felicidad y se han convertido en una auténtica fuente de inspiración para esta diseñadora que ya traspasa fronteras.
Sobre ellas, sobre sus mejores consejos de experta y sobre los secretos de su atelier hablamos en una entrevista cercana y sincera. "Mi primer traje lo hice con 15 años y la novia tenía 16 años". Sin embargo, su camino no ha sido fácil, llano; por falta de tiempo tuvo que hacer un pequeño parón de la confección a medida y el pasado septiembre de 2021 retomó los diseños nupciales: "Necesito estar en contacto con la gente".
España, Milán, Londres... para esta diseñadora salmantina se hace necesario "sentarse con la mujer y ver cómo ha cambiado el tiempo". Lleva casi 50 años confeccionando tela para elevar la moda al máximo exponente. "Lo que más me gusta de mi trabajo es el gran cambio que he visto en las mujeres, ha sido brutal", reconoce.
¿Cómo se vive?, ¿Cómo se piensa?... son las preguntas que se hace un día tras otro, "a mí me gusta crear para la mujer, no para un maniquí o para una modelo de pasarela", deja claro. Diseñar, preparar colecciones, desfiles, el trabajo en el taller... apenas le queda tiempo. Son muchos proyectos pero este le emociona especialmente porque le permite "estar en contacto con la calle".
Para hacer los vestidos de cada novia se inspira en ellas mismas. Normalmente lo que hace es preguntarles qué cosas les gustan, cómo se gustan ellas, qué estilo quieren tener, con el que han pensado o soñado. Sobre esas ideas y esa manera en la que ellas saben que se ven guapas, les propone otras cosas, "me gusta trabajar su cuerpo, decirle los cortes que le sientan bien para que estén más estilizadas".
Fely Campo lo tiene claro, quiere destacar la belleza de cada mujer, "que vean que están guapas y, después, que se fijen en el vestido", da especial importancia. "Este lugar es para ver una colección amplia de tejidos, formas y vivir una experiencia única. Con su estilo yo voy a adaptar un patrón".
Se realizan tres pruebas en las que Fely supervisa cada detalle. "Las mujeres para las que confeccionaba hace años eran mucho más mayores en su forma de vestir y vivir". Esto ha ido cambiando a lo largo de los años, "la mentalidad es mucho más joven. No soy partidaria de que alguien de 60 años se vista como una de 15 años, pero hay más libertad. Se lleva lo que uno quiere, ya no tenemos que ir encorsetadas en esas camisas y faldas de los 80".
Lamenta que en aquellos tiempos nunca llegó a conocer el nombre de pila de muchísimas mujeres, "eran la señora de... un fichero lleno de eses. Ahora somos alguien con nuestro nombre y apellidos. Afortunadamente, las cosas han cambiado muchísimo y yo me siento agradecida de pertenecer a esta generación del cambio".
Las novias que llegan hasta su atelier, previa cita, saben que no van a coincidir con ninguna otra, cada diseño es personalizado, "se puede repetir algún corte parecido pero siempre hay cambios, todas somos diferentes. No hay un vestido perfecto para alguien. Hay mil detalles, hay que sentirse muy cómoda dentro de él, no disfrazada, que se adapte a ti".
Es un vestido que tiene gran simbología "por lo que es importante identificarse con él". "Un vestido de novia tiene que ser atemporal, que no se pase de moda y que te siente muy bien, incluso que sea seductor. Es cierto que hoy en día la moda va muy rápido pero el vestido de novia es diferente, tiene su proceso y la novia tiene que sentir una complicidad absoluta".
Cada ceremonia influye también en la elección del vestido, pero si la ceremonia es por la Iglesia hay que seguir ciertas pautas. Aquí es dónde podemos optar por un segundo vestido para la noche, "¿por qué no?, puede ser algo con cierta inspiración lencera, lo que uno quiera, es el día de tú boda. Eso da más clase a tu día y a tu ceremonia. No se puede bailar hasta las tantas con un traje con gran cola... se estropea y es una pena", lamenta.
Respecto a los tejidos, le gusta mezclar "varias telas. Crepé, rasos de seda natural, mikado, brocado, los encajes son muy sutiles, deben tener calidad. No soy partidaria de pedrería y brillos, a lo largo de los años cansa un poco". En el atelier asesoran en todo, "desde la ropa interior, zapatos... todos los complementos. Hay que cuidar todos los detalles".
La diseñadora charra lo tiene claro, para elegir el traje de novia hay que ir con "las menos personas posibles. Es fundamental que nadie lo vea. Eso que dicen de las amigas... no. Su madre y su padre. La novia tiene que causar sorpresa, sobre todo, a su pareja. Muchas se olvidan de su pareja. Es algo único y se debe llevar en secreto".
'ME', LA COLECCIÓN NUPCIAL 2023
'Me', 'yo' en inglés, es el título de la nueva colección nupcial de Fely Campo para 2023, una propuesta inspirada en mujeres que desean sentirse como realmente son, sin artificios, en el día de su boda. "Esa es la clave: ahondar en la personalidad de cada novia, hacerla sentir segura de sí misma y única, sencillamente, ella misma".
Innovar en materia nupcial, partiendo del blanco, es el reto de Fely Campo en esta propuesta compuesta por 14 looks, investiga en tejidos clásicos que ahora cobran otra identidad. Destacan los rasos que se comportan como tafetanes, los encajes y brocados con acabado holográfico y la incorporación del tweed con hilo en plata.
Si hay dos tonos que salpican esta colección nupcial son el azul y el plata que aparecen sutilmente en botones, hilos de encaje y pedrerías bordadas a mano. Las lineas puras y geométricas, seña de identidad de la casa, se representan en vestidos estructurados, espaldas sorprendes, capas redondeadas y abrigos con cola cuadrada.
"Guantes rematados con corolas abullonadas y otros detalles del archivo de la directora creativa rematan Me, una colección pensada para mujeres reales".
