El Claustro de Doctores de la Universidad de Salamanca ha aprobado la concesión del doctorado 'honoris causa' a la jurista Araceli Mangas y a la filósofa Eulalia Pérez Sedeño, a las que se ha sumado la propuesta de Miguel de Unamuno y Jugo, quien fuera rector del Estudio salmantino durante 16 años, para recibir el máximo honor académico a título póstumo, coincidiendo con el centenario de su destierro a Fuerteventura por el directorio militar en febrero de 1923.
Tras la sesión, celebrada en el Paraninfo de las Escuelas Mayores bajo la presidencia del rector, Ricardo Rivero, de los 83 votos emitidos para cada propuesta Araceli Mangas obtuvo 81 votos a favor, mientras que Eulalia Pérez Sedeño obtuvo 77. Por su parte, Miguel de Unamuno logró 80.
Araceli Mangas
La candidatura de la Facultad de Derecho, a propuesta del Departamento de Derecho Público General, de nombramiento como doctora 'honoris causa' de Araceli Mangas ha sido defendida por el catedrático Luis Norberto González. Mangas, vicepresidenta de la Academia de Ciencias Morales y Políticas, ha protagonizado una destacada carrera académica e investigadora en las universidades de Salamanca y Complutense como catedrática de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales. Entre otros galardones, cuenta con el Premio de Investigación Julián Marías de la Comunidad de Madrid en 2022, el XXVII Premio Pelayo para Juristas de Reconocido Prestigio, que obtuvo en 2021, y el Premio Castilla y León de Ciencias Sociales y Humanidades, que le fue concedido en 2017.
Eulalia Pérez Sedeño
Por su parte, Eulalia Pérez Sedeño, primera catedrática en Lógica y Filosofía de la Ciencia de España, cuenta con una destacada trayectoria en la investigación en estudios en ciencia, tecnología y género. En la actualidad es profesora de Investigación en Ciencia, Tecnología y Género y directora del Departamento de Ciencia, Tecnología y Sociedad? del Instituto de Filosofía del CSIC. Su propuesta para recibir el 'honoris causa', defendida por la profesora Ana Cuevas, se presentó por parte de la Facultad de Filosofía y los consejos de Departamento de Filosofía, Lógica y Estética y del Instituto de Estudios de la Ciencia y la Tecnología.
Miguel de Unamuno y Jubo
Finalmente, la defensa de la candidatura de Miguel de Unamuno y Jubo fue presentada por su nieto Pablo de Unamuno, médico y profesor jubilado de la Universidad de Salamanca, quien consideró la concesión de esta distinción como "desagravio por el castigo injusto que sufrió", por el destierro al que fue sometido por Primo de Rivera.
Durante su intervención resaltó los méritos académicos "de un maestro vocacional",, desarrollados desde que obtuvo la cátedra en la USAL en 1891 hasta su jubilación en 1934, durante los cuales fue nombrado rector en tres ocasiones y destituido otras tantas por los gobiernos legales o ilegales del momento. 44 años (39, si se descuenta el periodo de destierro/exilio) en los que introdujo "un estilo liberal que necesitaba la Universidad, enfrentándose al integrismo tradicional dominante de ésta y de la ciudad, acentuándose el enfrentamiento, por su condición de vasco y socialista".
Pablo de Unamuno ensalzó también su faceta literaria y su compromiso político y social, plasmado bajo el lema "libertad, justicia, tolerancia y la verdad por encima de todos".