El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, aseguró este martes que en los más de seis meses de guerra, "las ciudades de Gaza se han destruido más que las alemanas durante la Segunda Guerra Mundial", recoge EFE.
"Imagínense la comparación", dijo Borrell, en un debate en el Parlamento Europeo sobre la situación en la Franja de Gaza. El jefe de la diplomacia europea, que insistió en la condena del ataque terrorista de Hamás contra Israel el pasado 7 de octubre y pidió la liberación de todos los rehenes israelís en manos de la organización palestina, volvió a reclamar un "alto el fuego inmediato".
Y en este sentido, dijo a Israel que "hay que evitar" una ofensiva en la ciudad gazatí de Rafah, "donde hay más de 1,3 millones de personas en las calles sin más protección que un trozo de plástico sobre sus cabezas", por los que "las consecuencias humanitarias serían catastróficas".
El alto representante afirmó que la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) es "irremplazable", después del informe que publicó ayer la exministra francesa de Exteriores, Cathernie Collona, a quien la ONU pidió que analizase la neutralidad del organismo, tras las acusaciones de Israel de que doce de sus miembros colaboraron con Hamás.
Borrell recordó que este informe señaló que la UNRWA debe mejorar su neutralidad en la selección del personas, pero que al mismo tiempo no encontró ninguna prueba que sustentase la acusación de Israel.
"Sí, hay problemas de neutralidad, pero eso es una cosa y la otra es participar en los ataques terroristas del 7 de octubre", apuntó Borrell.
El exministro español rindió homenaje a los 7 trabajadores de la ONG World Central Kitchen (WCK) que Israel mató en en un bombardeo, pero también a los más de 200 trabajadores humanitarios que han muerto desde el inicio de la guerra. "Nos movilizamos mucho ante el asesinato de estas siete personas, pero antes que ellos, también se asesinó a 249 y quizás no nos movilizamos igual", señaló el alto representante.
"Por primera vez, las Fuerzas de Defensa israelís reconocieron que el asesinato de estos trabajadores humanitarios fue un error dramático" dijo Borrell en referencia a los cooperantes de WCK, pero se preguntó: "¿Cuántos más errores han sucedido antes, sin que se haya reconocido?"
También pidió al Gobierno israelí que cumpla su compromiso de permitir la entrada de ayuda humanitaria a Gaza por el puerto de Ashdod, en el sur de Israel, así como por el cruce de Erez, que accede directamente al norte de la Franja, además de aumentar el flujo de ayuda procedente de Jordania que entra por el cruce de Kerem Shalom, en el sur.
"No se trata de anunciar, se trata de llevarlo a cabo y por el momento, se está llevando a cabo de forma muy lenta y con poca cantidad", afirmó Borrell.
En el último debate sobre la guerra en Gaza de esta legislatura antes de las elecciones europeas, hizo un llamamiento a conjurarse "para que los palestinos e israelís puedan vivir en paz y en seguridad, cada uno en su propio Estado".