El Atlético arrebata el liderato al Barça con un gol agónico
Los rojiblancos remontaron el partido en el minuto 96 en un encuentro que parecía tener controlado el cuadro catalán
El Real Valladolid cayó derrotado (3-0) en su visita al Bernabéu ante un Real Madrid que, sin estar acertado, castigó a los de Paulo Pezzolano en acciones puntuales de la segunda mitad. En la primera, el Pucela estuvo mucho mejor asentado y se fue al descanso con un empate más que merecido. Su esfuerzo defensivo y su buen hacer a la hora de mover el balón no tuvieron su merecida recompensa, a pesar de las diferentes intentonas locales que no se materializaron gracias a Hein, que volvió a lucirse en la portería. El Pucela ya piensa en el Leganés, pero se va del feudo blanco con la cara bien alta y con una engañosa y abultada derrota.
El Real Valladolid empezó el partido como debe... y más ante este tipo de rivales. Los de Paulo Pezzolano, que fueron valientes cuando tuvieron que serlo, plantaron cara en todo momento a los locales que les costaban trenzar jugadas. Mucha estrella junta en el campo, pero sin ser un equipo en lo puramente colectivo. El Pucela se asentó en bloque bajo, a veces con los 11 jugadores en los últimos metros, para no dar opción a los arietes del Real Madrid.
Aun así, la calidad pudo decantar la balanza a las primeras de cambio. Un buen remate de volea de Mbappé, que debutaba en casa con la camiseta blanca, obligó a Karl Hein a intervenir. El cancerbero blanquivioleta, que está dejando muy buenas sensaciones, despejó el balón sin mayores problemas. Con el paso de los minutos, el encuentro se trababa, más por la lentitud a la hora de circular el balón del Madrid que por el Real Valladolid, que desbarataba las tímidas intentonas de los merengues, que se aferraban a una genialidad de sus galácticos para abrir el marcador.
Como no llegó por mérito de un Pucela combativo, el partido afrontó los últimos compases de la primera mitad con un merecido empate a cero en el marcador, ya que ninguno de los dos conjuntos se mereció ir ganando, a pesar de que el Madrid fue el que pisó más el área del Pucela, obligado por su 'pinchazo' en la primera jornada y por no decepcionar a su gente, que pitó en más de una ocasión a los suyos por sus malas prestaciones.
La reanudación le sentó mejor a los de Carlo Ancelloti. Los blancos necesitaban un gol para tranquilizar al Bernabéu, que ya estaba nervioso por lo que podía pasar. El Pucela tenía, de hecho, mucha culpa de ello. Sin embargo, en una acción a balón parado los locales derribaron el muro pucelano. Un fuerte disparo de Fede Valverde salió revotado y se coló en el fondo de la red (1-0). Se desataba la locura en el feudo blanco tras una primera parte llena de inseguridades.
El Pucela reaccionó y de qué manera al tanto del uruguayo. Courtois tuvo que sacar una mano milagrosa a Meseguer tres minutos después del tanto merengue tras una buena jugada trenzada de los pucelanos, que metieron el miedo en el cuerpo al Bernabéu. Los aficionados ovacionaron al belga porque sabían que esa acción podría ser clave en el devenir del choque... como así fue. No obstante, los de Pezzolano no perdieron en ningún momento la cara al partido, a pesar de las intentonas de los blancos, que se encontraron hasta en dos ocasiones con Hein.
En primer lugar, fue Arda Güler el que probó y estuvo a punto de sentenciar el choque. El turco, que volvía al once titular, no acertó en la media luna del área y el estonio logró sacar el balón cuanto este se metía dentro. Y, en segundo lugar, Mbappé, con un taconazo, también tuvo la suya, pero otra vez Hein desbarató la acción, salvando al Pucela que estaba en el filo del precipicio. El Pucela aprovechó que el Madrid no estaba atinado para generar peligro y pudo, de hecho, empatar el encuentro. Sylla encaró a Courtois, lejos de un mano a mano, y disparó, pero su intentona se fue fuera.
Pezzolano agitó la coctelera y, ya a la desesperada, buscó el empate con la entrada de Amallah, Moro, el citado Sylla y Amath, cuatro de los teóricos titulares que lideraron la faceta ofensiva de los blanquivioletas, que no se rindieron tan fácil. El paso de los minutos perjudicaba al Pucela, que era el que iba por detrás en el marcador. Ya con toda la artillería arriba, el Madrid aprovechó los huecos generaros para acabar matando el encuentro. Brahim batió a Hein (2-0) antes del descuento, y en el mismo, Endrick puso el tercero (3-0), certificando, de esta manera, la primera victoria de los locales en LaLiga EA Sports.
Los blanquivioletas se enfrentarán al Leganés en busca de la segunda victoria consecutiva de la temporada, algo que podría aupar en la clasificación.
[Imágenes de la crónica a cargo de Sergio Borja]