El comienzo de liga fue agridulce para Unionistas. Con minutos de gran juego y de claro dominio, el esfuerzo físico a estas alturas de temporada resultó decisivo y permitió al Sestao rescatar un punto. Santamaría adelantó a los charros a los 14 minutos de partido, pero Leandro aprovechó un error defensivo para hacer el 1-1 en el 69'. Resultado con el que se llegó al final y dio un punto a cada equipo.
Era el momento de demostrar el verdadero nivel del equipo y Unionistas dejó claro que Dani Llácer ya ha dejado su sello en cierta medida. Con una apuesta clara por el ataque, los charros empezaron dominando en un escenario peculiar al no haber público en Las Llanas. Dominio que se tradujo con un Sestao encerrado atrás en los primeros compases.
Vergés estuvo muy activo por la banda izquierda, así como Iván Moreno por la derecha. Dos jugadores que no dejaron de buscar el uno contra uno y el desequilibrio por los lados, siendo el primero de ellos el mejor socio de Santamaría. Con Vergés y Santamaría llegó el 0-1 en el minuto 14. Un mal saque en largo de Iago Herrerín permitió a Pau coger la pelota y montar el contraataque con un pase a Vergés. El extremo la puso al área desde la izquierda y Santamaría llegó desde atrás para batir al portero. Gol de ariete y dedicatoria al cielo por la Unión Deportiva Salamanca.
Estando por detrás en el marcador, el Sestao River ganó metros y trató de buscar el empate con un Planas que fue el más activo de los suyos. Acciones que no llegaron a nada más allá de encerrar a un Unionistas bien plantado y que supo sacar cualquier balón. La más clara de los locales la tuvo Leandro en el 33'. El delantero recibió un balón dentro del área tras un gran pase filtrado de Planas a Markel Etxebarria y centro de este, pero el remate se fue alto ante un Iván que poco podía haber hecho en caso de ir a portería.
Más allá de ese susto el peligro no fue a más y Unionistas volvió a dominar. Cerca estuvo de llegar el segundo al borde del descanso. De nuevo Vergés llegó desde la izquieda, cedió a Santamaría y este a un Rabadán que remató forzado pero estuvo a punto de mandar el balón dentro.
La segunda parte volvió a empezar con dominio visitante. Unionistas siguió siendo atrevido y tardó siete minutos en meter el miedo en el cuerpo de la defensa del Sestao. Pascual llegó por la derecha y centró al área, donde Pau Martínez remató de cabeza y el balón se fue fuera. Un remate que demostró la apuesta de los de Llácer.
Pero como en la primera mitad, el Sestao se repuso con el paso del reloj y apretó más. Los vascos tuvieron el empate en el 55' en las botas de Planas, quien se plantó ante Iván Martínez y este tuvo que sacar una mano rápida para desviar el balón a córner. Nuevo aviso del Sestao, que tardó un cuarto de hora más en poner el empate.
Dani García perdonó el 0-2 en un contraataque de Carlos de la Nava que lo dejó solo ante el portero, remató de primeras y el cuerpo de Herrerín desvió lo justo para evitar el gol. Perdón y lágrimas a pesar del triple cambio de Llácer, que buscaba justamente lo contrario. Encerrados atrás, los charros no supieron defender un balón que llegó a Leandro dentro del área y el delantero no perdonó con un disparo que se fue directo a la escuadra de Iván. 1-1 y 20 minutos por delante.
Con el empate Unionistas se disipó y el Sestao se revolucionó. Tuvo Sergi García el 2-1 con un disparo que dio en el larguero tan solo dos minutos después del gol. El protagonismo del Sestao coincidió con el bajón físico de Unionistas, que pagó caro el sobreesfuerzo de una primera parte donde fue mucho mejor que el rival.
Afortunadamente, la recta final no cambió el resultado y Unionistas vuelve a casa con su primer punto y con un debut que, pese a no ser el mejor posible, deja pistas de lo que podrá ser el equipo con Llácer al frente.
