Unionistas rescató un punto más que merecido en casa. El gol del Toni Fernández a los cinco minutos no frenó el ímpetu de unos blanquinegros volcados en ataque y que buscaron, una y otra vez, el gol. Hubo que esperar a la recta final para que Jonny firmase dos goles que desataron la locura y dejaron la segunda victoria en casa del año.
Era de esperar un partido de alta intensidad y así fue desde el primer minuto. Unionistas probó a Astralaga con disparo flojo de Eudald Vergés tras una gran jugada por la banda derecha que acabó en un centro lateral. Centros laterales que fueron la tónica dominante por parte de los locales durante todo el choque.
El aviso de Unionistas sirvió para provocar que Astralaga se convirtiera en el enemigo número uno del Reina Sofía por perder tiempo, aunque el gol llegó del bando contrario. A los cinco minutos los blaugranas llegaron por la izquierda, colgaron un balón al área y Toni Fernández, sin oposición pero rematando forzado, superó a Iván. 0-1 y reacción blanquinegra inmediata.
Las acciones peligrosas de Unionistas no faltaron, especialmente gracias a un Iván Moreno muy activo por la banda que sacó de quicio a Landry. Pero los centros del equipo no encontraban rematador y la afición se cabreó con el colegiado por no señalar una posible mano de un defensa cuando retuvo el balón en el área.
El Barça Atlètic necesitaba poco para llegar al área rival y Ureña lo demostró. Una buena combinación por dentro dejó al extremo en el pico del área y obligó a Iván a parar en dos tiempos. El partido estuvo marcado por un ritmo muy alto, un auténtico correcalles donde el centro del campo desapareció por momentos y donde Unionistas continuó apostando por los centros, aunque sin suerte.
Iván salvó al equipo a la media hora de partido con una mano providencial a un tiro de Unai que buscaba su segundo palo. Y como antes, respuesta rápida de los locales. Iván Moreno demostró, una vez más, que estaba de dulce y colgó una pelota que Gorka cabeceó muy cerca de la portería. Fue el propio extremo el que cayó en el área en el minuto 36, pero el colegiado no consideró que fuera penalti y la temperatura subió en la grada. Y sin más goles se llegó al descanso a pesar de Unionistas, que no dejó de probar suerte pero no encontró los remates decisivos dentro del área.
Unionistas volvió al campo con las mismas ganas. Los charros no bajaron el ritmo y en cinco minutos tuvieron cuatro ocasiones, una de ellas teniendo que sacarla la defensa sobre la línea.
Hubo que esperar 20 minutos para que la grada casi celebrase el empate. Un centro de Pau muy largo lo remató Gorka Santamaría emulando a Marco van Basten, pero la pelota golpeó el segundo palo. Todo ello en una segunda mitad donde el Barça Atlètic pareció no comparecer, encerrado atrás y dejando a un lado su propuesta de juego.
Dani Llácer dio entrada a Rastrojo para buscar más soltura en la banda, pero el futbolista aguantó ocho minutos sobre el terreno de juego antes de irse lesionado. Pero fue otro cambio el que cambió la cara al equipo. Jonny saltó al campo en el minuto 70 y tardó tan solo tres minutos en marcar. El delantero recibió en la frontal, cargó la pierna y superó a un Astralaga incapaz de hacer nada para evitar el 1-1.
El gol despertó al rival. Sin embargo, Iván no intervino. Pero la polémica llegó a seis minutos del final, cuando Ramiro cortó un contraataque de Cedric y el colegiado le enseñó la roja directa cuando parecía que se la había quitado sin problema. Todo parecía destinado al empate y Jonny lo evitó en el minuto 89. El delantero remató un centro tirándose con más fe que posibilidades, llegó al balón y logró el 2-1 para locura total del Reina Sofía. Dos goles de Jonny que desataron la fiesta en el estadio salmantino, donde los partidos se cuentan por victorias en este arranque de liga.