Una buena dosis de 'vilarina', o lo que es lo mismo, la aparición del ADN Avenida de la mano de Andrea Vilaró permitió a Perfumerías Avenida desatacarse en el momento justo, meterse en partido ante el DVTK y sentenciar el duelo con un triple de la propia escolta catalana para que el equipo salmantino logre una primera victoria a domicilio que vale su peso en oro. Los triples y la defensa de la 13 de Avenida espabilaron al equipo que firmó un excelente tercer cuarto para remontar y tomar el mando. Además supo jugar el final y cerrar el triunfo de manera notable.
En Euroliga las lecciones se aprenden a base de sudor, lágrimas y a veces hasta sangre. Perfumerías Avenida sufrió de lo lindo, y en buena medida por propios errores, en su primera salida de la temporada ante Schio y dos semanas después visitaba el pabellón de Miskolc, en Hungría, para tratar de demostrar que había tomado buena nota de todo lo que hay que hacer (y no hacer) cuando se afrontan duelos europeos. Son partidos donde, como decía Montañana hace unos días, la exigencia física y también la mental está un paso por encima de lo que se ve en la Liga española.
Quizás incluso más que un paso y para confirmarlo solo hacía falta ver la 'planta' de la escuadra húngara, con una media de altura elevadísima y varias torres que venían mostrando y también demostraron su poderío ante Avenida. DVTK, consciente de ese arma que atesora, planteó un partido duro desde el minuto uno al que inicialmente se acomodó bien el equipo de Anna Montañana.
A un golpe respondía con otro, a un triple local llegaba el correspondiente azulón en primera instancia de mano de Iyana Martín secundada después por Arica Carter. Aunque se vislumbraba un pequeño 'agujero' en la defensa del rebote, se conseguía tapar con un par de buenas defensas y recuperaciones para correr y anotar fácil y así el primer cuarto finalizaba con Avenida por delante tras dos tiros libres anotados por Fasoula.
La situación comenzó a resquebrajarse en el inicio de un segundo cuarto en el que DVTK, de la mano de Aho, anotó a su favor un parcial de 8-0 ante el que Avenida asistió casi impasible. El 'roto' del rebote le daba seis posesiones más de ataque al equipo húngaro que empezaba a soltarse en ataque y se mostraba muy rocoso atrás, cerrando los caminos al aro y aprovechando que Avenida no encontraba acierto exterior. Guirantes, siempre con defensora encima o echándose sobre ella, intentaba resolver sin acierto, llegaban unos pasos de Herbert-Harringan y el triple de Lelik que sumado a una canasta de Charlas ponían el +11 a favor de las locales y provocaban el segundo tiempo muerto de Montañana.
Por fin Avenida se desatascaba con un triple de Guirantes y tras dos buenas defensas y llegaba el tiempo muerto local. Avenida se ponía a seis pero perdía la opción de atacar el aro en la última posesión y 'regalaba' dos puntos al DVTK que se iba con ventaja más cómoda al descanso, 37-29.
Entró mucho mejor el equipo tras el descanso, con una canasta de Koné y un triple de Vilaró y también con un par de buenas defensas, aunque en la carga al rebote sobrevivía DVTK ante ese arreón inicial pero Avenida estaba en sus mejores minutos y dos aciertos más desde 6,75 de Guirantes y de Vilaró empataban el duelo, 41-41, antes de que lo parara el técnico local.
Los ajustes atrás eran visibles con caminos mejor cerrados en los cortes a aro del rival y el trabajo y desgaste se hacía visible con Vilaró pidiendo el cambio después de excelentes minutos. Ejemplo de responsabilidad importante y que facilita el trabajo y más cuando se tiene una plantilla larga.
Avenida había conseguido remontar y se situaba por delante intentando aprovechar la inercia positiva de cuarto, con buenas conexiones ofensivas, en general buenas elecciones y en el que llegaba a tener un +8 que se quedab en +5 tras el triple de Gulbe, 48-53.
Un triple sobre la bocina de posesión de Lelik igualaba todo en el inicio del último parcial en el que los árbitros rebajaban el listón que habían puesto en el tercer permitiendo 'pegar' más dentro a las locales. Un aviso como equipo visitante que Avenida debía tener en cuenta porque la experiencia de cómo se arbitra en Europa también es algo a manejar. Y lo vivió en sus carnes Silvia Domínguez con una técnica por irse al suelo tras un contacto en un rebote. El encuentro se ajustaba así que cada balón era una pelea y la obligación de cerrar el rebote con más eficiencia que hasta entonces se multiplicaba.
Un +2 de Gil ponía el 56-61 y llegaba el tiempo muerto húngaro con triple posterior de Jovanovic. Todo se volvía a igualar a tres del final y volvía a dar respuesta Gil en esa particular batalla que había emprendido con la pívot serbia. A dos del final ponía Gulbe el 61-63 desde el tiro libre y aunque Martín no dudaba y acertaba, de nuevo el rebote daba vida a DVTK que además sacaba adicional tras una captura de Charles, 64-65, con 53 segundos por disputarse.
Y en ese tramo final, en el momento justo para dar aire a su equipo, volvió a aparecer Vilaró que aprovechó un buen movimiento de balón que la encontró sola en la esquina para no perdonar y anotar un triple que a la postre fue el definitivo.
