El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, ha ensalzado hoy el "trabajo primordial" de los arqueólogos en la puesta en valor de espacios de la ciudad como el cerro de San Vicente, el parque del Botánico, el Pozo de Nieve, el centro de interpretación de las Murallas y la cueva de Salamanca. El primer edil ha reconocido su labor "incansable y comprometida" que ha permitido que la capital sea "un ejemplo en cuanto a la catalogación y protección de esos restos".
Así se ha pronunciado García Carbayo durante la apertura del octavo congreso internacional 'El arte de las sociedades prehistóricas' en la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Salamanca. En la inauguración también han participado la vicerrectora de Cultura, Patrimonio, Sostenibilidad y Desarrollo de Campus de la USAL, Matilde Olarte; el decano de la Facultad de Geografía e Historia, José Luis de las Heras; y la organizadora del congreso, la profesora Olivia Rivero.
García Carbayo ha señalado que Salamanca tiene la "inmensa fortuna" de contar con un yacimiento Patrimonio de la Humanidad como es el de Siega Verde. "Un recurso turístico de primer orden que engrandece aún más nuestra provincia", ha añadido, al tiempo que ha recordado que, enlazada con esta representación artística, existen en la propia capital salmantina otros dos yacimientos de gran valor declarados el pasado año por la Junta de Castilla y León como Bien de Interés Cultural. "Me refiero a los que acoge el paraje de La Salud, a orillas del río Tormes. Uno paleolítico, compuesto por grabados en los que, al igual que en Siega Verde, se usó la técnica del piqueteado y la incisión. Y otro post-paleolítico con una serie de pinturas y también grabados. En ambos casos nos encontramos representaciones geométricas, de animales y antropomorfas que fueron descubiertas hace muy pocos años. Concretamente en 2007", ha indicado García Carbayo.
El alcalde de Salamanca ha señalado que, desde Ayuntamiento de Salamanca, se está trabajando en una mayor protección de este arte rupestre "siempre de la mano de la Junta de Castilla y León". Asimismo, el pasado año se solicitó al Ministerio de Turismo tres millones de fondos europeos para convertir los antiguos túneles militares de la zona denominada como El Polvorín, próxima a los yacimientos, en un una estación de arte rupestre con un centro de interpretación. También se incluye el vallado de las 88 hectáreas donde se encuentran las pinturas y grabados.
"Para una ciudad como Salamanca, la protección de estos yacimientos es una prioridad. Esa muestra de arte rupestre a las puertas de la capital cierra un círculo que continúa con el origen de la ciudad en el cerro de San Vicente donde hemos hallado vestigios de la primera Edad del Hierro. Y prosigue con el traslado de la población al Teso de las Catedrales, germen de la Salamanca que conocemos hoy en día", ha concluido el alcalde.
