La escritora salmantina Elma García explora en su primera novela 'Amniótica' el alquiler de vientres, el deseo de la maternidad y la relación entre dos hermanas en un pueblo de Castilla y León.
"La historia parte de una premisa complicada: una le pide a otra que haga de vientre de alquiler. El núcleo de la novela es esa maternidad subrogada", ha explicado en una entrevista con EFE García, que este viernes presenta su primera obra en la librería Santos Ochoa de Salamanca, acompañada por Raúl Vacas y Tomás Hijo.
García, periodista de formación, ha querido abordar cómo las personas se plantean su paso por la vida y qué es lo que van a dejar, con la maternidad subrogada como escenario de ese conflicto dramático.
"No he querido sentar ningún dogma, la novela te va presentando las diferentes cuestiones del asunto, va mostrando cómo, cuando tratas de cuidar a una persona, puede llegar un momento en que te excedes", ha relatado.
Y ha añadido: "En la maternidad, que es el tema principal de la novela, cuando una mujer está embarazada, su cuerpo se visibiliza de manera muy social, todo el mundo opina, eso me parece agresivo".
García califica su obra como una "novela de personaje tipo Patricia Highsmith pero sin tanto misterio" y también la describe como "un gran drama pero en el que no falta el humor ácido".
"Me interesaba hablar de lo pervertido que es a veces nuestro mundo"
Elma García no sienta dogmas con su novela pero considera que el alquiler de vientres es un tema "muy abierto" en el que "hay un hueco de legalidad que nos coloca a todos en un terreno muy movedizo".
"Por un lado en España es ilegal hacerlo, pero cualquiera con economía media-alta puede hacerlo en otros países. Ante el deseo de ser madre, un deseo muy fuerte, es muy difícil tener un criterio coherente y hablar de moral", ha indicado, para añadir que lo que le interesaba era "hablar de lo pervertido que es a veces nuestro mundo".
La autora, que reside en Madrid aunque frecuenta Salamanca para visitar a su familia, se dedica ahora plenamente a la escritura tras haberse formado como periodista, haber trabajado en publicidad y haber sido trabajadora pública de la oficina de empleo.
"La pandemia fue un periodo importante para darse cuenta de las necesidades de cada uno. Yo me di cuenta de que no podía compatibilizar más el trabajo y la escritura. Ahora estoy escribiendo poesía, pero la novela requiere un tipo diferente de concentración, un tipo de serenidad y un esfuerzo diferente", ha explicado.
Con su primer libro, que salió el 8 de abril, los lectores le han trasladado que es una novela "que engancha" y ella está especialmente orgullosa de la tensión narrativa que ha podido lograr especialmente en la segunda parte de la obra. FUENTE: EFE