Isabel Rodríguez
Jueves, 28, Noviembre, 2024
SucesosNoticias 24 horas
El Servicio de Protección a la Naturaleza (SEPRONA) de Salamanca ha investigado a cuatro personas como presuntos responsables de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente, evitando que más 3.600 toneladas de dióxido de carbono (CO2) fueran emitidas a la atmósfera, lo que podría afectar gravemente a la capa de ozono y favorecer el calentamiento global.
Las investigaciones se han desarrollado en el marco de la Operación SACATCYL23, cuyo objetivo es comprobar la correcta gestión de los gases fluorados utilizados en los sistemas de refrigeración de los vehículos a motor para preservar y mantener el medio natural.
Los agentes de la Guardia Civil han inspeccionado un total 11 CAT (desguaces) de la provincia, y se ha controlado documentalmente más de 10.000 vehículos, detectando que 3 de ellos incumplían gravemente la normativa medioambiental obligatoria y comprobando que existían varias irregularidades, tanto en la actividad física como en la documental, de varios centros de la provincia que recogen los vehículos al final de su vida útil (VFVU), concretamente en la incorrecta gestión de los gases refrigerantes contenidos en los sistemas de aire acondicionado procedentes de vehículos dados de baja.