Entre gritos y abucheos, decenas de personas han recibido a Óscar S.M., el principal sospechoso y presunto autor de la muerte de Esther López, la joven que fue encontrada muerta en una cuneta de Traspinedo tras un mes desaparecida, a las puertas del Juzgado de Instrucción Número 5 de Valladolid.
"Asesino" o "hijo de puta" han sido algunos de los calificativos más repetidos en la llegada del investigado al juzgado donde este viernes, 20 de diciembre, se celebra una vista preliminar en la que ambas partes pueden presentar peticiones antes de que se abra el juicio oral con jurado popular.
Con múltiples agentes de la Policía Nacional, desplegdos en el perimetro para evitar cualquier tipo de contratiempo o suceso, la familia de la joven de 32 años, fallecida en 2022, se ha concentrado desde las 10.30 horas de la mañana para pedir justicia, como hicieron el pasado 6 de septiembre cuando los cuatro peritos de la defensa del acusado, incluido Óscar S.M., prestaron declaración. "Sin justicia no hay descanso. Justicia para Esther ya", ha repetido.
El "infierno" que está viviendo la familia parece que está más cerca de terminar con el sospechoso entre rejas, algo que la hermana de la víctima lleva pidiendo durante los últimos dos años y medio: "Todo el mundo que haya leído el informe sabe que esta persona es la que ha acabado con la vida de mi hermana".
